martes, 20 de diciembre de 2011

Hay historias de coincidencias, y casualidades, y cruces, y cosas extrañas, y de tal y cual, y de quien sabe. Y generalmente decimos, bueno, si eso saliese en una película no me lo creería. No se quien conoce a no se cual y tal y tal y tal. Y, en la humilde opinión de este narrador, ocurren cosas extrañas a todas horas. Y así es, y asi es. Y la vida dice, quizá nosotros hayamos acabado con el pasado pero el, no ha acabado con nosotros.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

El ladrón de orquídeas.

Cada orquídea se parece a un determinado insecto, así que el insecto se siente atraido por esa flor, su doble, su alma gemela, y no hay un anhelo mayor para él que hacerle el amor. Cuando el insecto se aleja, divisa otra flor alma gemela y le hace el amor, pero, ¿como van a saber ellos que gracias a su danza el mundo sigue girando?. Y así es, por el simple hecho de hacer lo que estan llamados a hacer ocurra algo grande y magnífico. En ese sentido nos enseñan a vivir, nos enseñan que el único barómetro que tenemos es el corazón, que, cuando descubres tu flor, no puedes dejar que nada te aparte de ella.

El ladrón de orquídeas.

Supongo que si tengo una pasión Inconfesable: quiero saber lo que se experimenta al sentir tanta pasión por algo. La mayoría de la gente anhela algo tan extraordinario, algo tan estimulante que arriesgan todo por ese deseo. Muy pocos harían algo. Es muy fuerte y enajenante estar junto a alguien tan lleno de vida. Hay demasiadas ideas, cosas y gente, demasiadas direcciones que tomar. Empiezo a pensar que la razón por la que es tan importante apasionarse por algo, es que de esa forma se esculpe al mundo a un tamaño más asequible. La vida parece estar llena de cosas similares a las Orquídeas, fascinantes para la mente, cautivadoras para el corazón, pero un poco fantásticas, efímeras e inalcanzables
Te bebiendo payaso de ojos tristes.Tus amantes te traicionaban y tus sueños se rompían. Andabas por los bares, con resaca y con la boca seca. Sin experimentar miedo por amar o no ser amado. Decías que sólo los hombres de suerte carecían de imaginación para sufrir. No había elección, estabamos unidos por un destino singular, el miedo a la soledad. La soledad era tan grande que puedo verla en el lento movimiento de las agujas del reloj. Nunca nadie encuentra a quien busca,decias, nada dura, repetías. Tenías un vaso de los lamentos y te sentabas a beber con el por las amantes que te habían herido, por los sueños que se habían perdido para siempre en el baúl de la memoria.Me enseñaste que no toda la gente es buena con los demás y que para no ser herido no debes herir. Cuantas horas estuviste esperando que las cosas mejorarán y cuantas horas esperaste a que el teléfono sonara mientras te volvías loco...Y la radio pasa canciones de amor, y el tiempo sigue su tenue compás, y los amantes continúando besándose, y la luna aún saliendo por las noches, y tú...tú sigues bebiendote tus penas y tus fustraciones, mezclando tus lágrimas con el licor, evadiendote del mundo con ese veneno tan perverso, pero a la vez tan inocente y esperanzador.

El plan infinito

Quién te dijo que la vida era fácil?Siempre hay dolor y esfuerzo. Tendrás que enderezar el eje si eso es lo que se requiere.Deja de lamentarte y levántate de una vez. Te las has arreglado
para vivir huyendo, pero no se puede correr siempre. En algún momento hay que parar y enfrentarse consigo mismo.Por mucho que corras, siempre estás dentro de la misma piel.

miércoles, 7 de diciembre de 2011

lunes, 5 de diciembre de 2011

Courage.

¿ No sientes, a veces, que eres demasiado diferente para ser de este mundo? Quizás nadie entienda las reglas de mi juego. O quizás sean tan complicadas de entender que ni siquiera lo intentan. Lo malo de ir a contracorriente es que hay que tener valor. Valor para no sentirte solo la mayor parte del tiempo. La diferencia acaba con casi todo lo que valoramos. Y a veces retienes tan poco que hasta el mínimo detalle provoca euforia. Llamo euforia a todos los instantes en que te quedas sin aliento o a ese segundo en el que, sin poder evitarlo, gritas con rebeldía en silencio todo lo que no te atreves a decir en voz alta. Lo bueno de ir a contracorriente es que lo poco que ganas, aunque casi nadie te entienda, si merece realmente la pena.

domingo, 4 de diciembre de 2011

Un día comprendí que el silencio vale más que mil palabras, que tomar una mano no significa atar un corazón, que no se debe correr detrás de alguien que siempre huye de ti, que el amor se debe demostrar no se debe mendigar, que a alguien a quien queremos solo se le puede desear toda la felicidad del mundo aunque no sea a tu lado.